Hoy os traigo una de esas recetas que tengo guardadas en Instagram. Tengo varias categorías, deco, tartas, salado, viajes, rrss y recetas cuquis. En esta última guardo todas las recetas que me encantan cuando estoy visitando Instagram y que realmente quiero hacer. Este es el propósito de este año, ya que me he tomado un año sabático de libros, he decidido hacer reels y publicar todas estas recetas que he sido guardando. También voy a hacer otras cosas, como volver a retomar los cursos como antes de la pandemia, pero ya os iré contando por aquí.
Con esta receta abro una categoría nueva en el blog, en dónde iré subiendo recetas sin gluten, ya que parece que me he aficionado después del éxito del capítulo Bundts Sin gluten de mi nuevo libro Todo sobre los Bundt.
Las almendras nunca han sido mi fruto seco favorito. No me entendáis mal, me las como, pero no me apasionan. Igual pasa con los postres que llevan almendra, no habréis visto muchos por aquí, Pero como os digo, desde que hice el Bundt de zanahoria y almendra del nuevo libro me gustan un poco más.
Esta receta es es deliciosa. Ha quedado una textura húmeda, tipo mousse muy jugosa y que repetiré seguramente si tengo que llevar tarta a algún sitio.
También he preparado un Reel que puedes ver aquí
TARTA DE RICOTTA Y ALMENDRA
INGREDIENTES
- 125 g de mantequilla
- 150 g de azúcar
- 400 g de ricotta
- 1 cucharadita de pasta de vainilla
- 3 gotas de extracto de almendra amarga (opcional)
- Ralladura de 1 limón
- 4 huevos L (separadas yemas de claras)
- 200 g de harina de almendra (almendra molida)
- 50 g de almendra laminada
- Azúcar glass para decorar
PREPARACIÓN
- Coloca la ricotta en un colador para que suelte el exceso de líquido mientras preparas el mise en place.
- Precalienta el horno a 175ºC
- Engrasa un molde desmontable de 20 cm y cubre la base y laterales con papel de hornear. Engrasa los papeles también.
- Bate las claras a punto de nieve y reserva.
- Bate la mantequilla junto con el azúcar hasta que haya blanqueado y obtengas una mezcla suave y cremosa. Incorpora la ricotta y bate un par de minutos más hasta que esté perfectamente incorporada. Para la batidora un par de veces y ayúdate con una espátula para bajar cualquier resto de las paredes y de la base.
- Agrega la ralladura de limón, la pasta de vainilla y el extracto de almendra.
- Añade las yemas una a una. No añadas la siguiente hasta que no se haya incorporado la anterior.
- Añade la harina de almendras y mezcla hasta que justo esté incorporada.
- Incorpora 1/3 de las claras a punto de nieve a esta preparación, con una espátula, suavemente y con movimientos envolventes. Incorpora los otros 2/3 de las claras en dos veces.
- Vierte en el molde que teníamos preparado y alisa la superficie.
- Espolvorea la parte superior con almendra laminada.
- Hornea 55-60 minutos en la rejilla central del horno precalentado, calor arriba y abajo y sin aire.
- Retira del horno y deja enfriar totalmente sobre una rejilla.
- Desmolda y coloca en el plato donde lo vayas a servir y espolvorea con azúcar glass.
Observaciones
- Si has leído la receta hasta aquí seguramente la hagas. No, no se me ha olvidado el polvo de hornear, esta receta no lleva.
- Esta tarta crece solo un poquito pero se baja al enfriarse, es totalmente normal.
- Asegúrate de que la harina de almendra no tiene grumos.
- El extracto de almendra amarga que he utilizado es muy concentrado, por eso solo puse 3 gotas. Puedes obviarlo perfectamente.
- Yo he utilizado este molde desmontable de Masterclass de 20 cm
- Recuerda escurrir bien la ricotta en un colador antes de añadirla, para que suelte todo el suero. Hazlo aunque creas que no es necesario.
- La receta original la tenéis en Cooking with Manuela
Este fin de semana la pruebo, seguro que triunfo en casa con esta receta!
Muchas gracias!