Por la tarde, leí muchas recetas en internet, pero ninguna me convenció del todo, o bien porque no tenía algunos de los ingredientes, o bien porque a Antonio no le iban a gustar. Así que improvisé y fui haciendo la receta “sobre la marcha”. A media cocción se me ocurrió echarle un trocito de chocolate, ya que había leído por los blogs que el chocolate hace que los sabores se intensifiquen. Así que como Antonio estaba “revoloteando” en la cocina, disimuladamente le dije que era mejor que llevara la basura antes de que se hiciera muy tarde, porque si me llega a ver echándole chocolate al guiso, directamente no me lo come.
Inmediatamente después de echarlo pensé “pero cómo se me ha ocurrido a mí hacer esto, que mal pensamiento me habrá poseído para cometer este terrible error!!!!”, ya que el guiso obviamente olía a chocolate…..”Me acabo de cargar el guiso por toda la cara. Ea!! € 15 de comida tirados a la basura”…. Bueno, lo voy a dejar al mínimo y mañana será otro día.
Esta mañana el pobre guiso seguía encima de la vitrocerámica y al destaparlo, no olí el chocolate, cosa que me tranquilizó. Además comprobé que se le había quedado una rica salsita. Casi a la hora de comer le comenté a Antonio, como quien no quiere la cosa: ¿Tú crees que nos gustará el guisito de cordero. Nunca lo hemos probado???? A lo que él me responde “Bueno, tampoco hemos probado a tener nunca 100 millones de Euros. El cordero nos gusta, seguro que estará rico”… Su repuesta me dejó convencida.
En el fondo, la que tenía los prejuicios sobre el chocolate era yo …. Y antes de montar el plato, cuando la carne ya estaba caliente tuve que probar un trocito para relajarme ya que el tema del chocolate me estaba agobiando un poco, y para mi sorpresa estaba delicioso, me dio un subidón…!!!
Monté el plato, saqué las fotos, y ya solamente me quedaba pasar el examen final. El paladar de Antonio. Él tiene un gusto muy fino y lo detecta todo…. Así que pasados unos minutos desde que empezamos a comer, le pregunté ¿Qué tal?….Al no responder le volví a preguntar impacientemente, a lo que contesta tranquilamente: “¿Tú que crees?? Está riquísimo, o no ves que estoy callado. Por este plato seguro que hubiéramos pagado € 18 en un restaurante de esos pijos”. Tema zanjado.
Por segundo fin de semana consecutivo tengo que decir, que he conseguido que Antonio pruebe algo nuevo y que le guste. Prueba superada.
Aquí va la receta.
INGREDIENTES
500 gr. de pierna de cordero deshuesada cortado en trocitos pequeños (sin grasa).
2 cebollitas francesas.
1 zanahoria.
1 vaso de vino.
Vinagre balsámico.
2 cucharaditas de picada de ajo y perejil.
15 gr. de chocolate negro.
Aceite, harina, sal y pimienta.
PREPARACIÓN
Pochar las cebollitas bien picadas a fuego muy lento con un poco de sal. Retirar el aceite y reservar.
Rehogar el cordero al que previamente habremos salpimentado y le habremos echado solo una cucharada de harina por encima. Cuidado con el aceite, ya que suelta un poco de grasa
A medio dorar echar la cebolla que teníamos reservadas, las zanahorias y la picada de ajo y perejil. Dejarlo cocinar durante unos 15 minutos a fuego medio.
Eliminar totalmente el aceite de la olla y echar el vino blanco y un chorrito de vinagre balsámico dejar hervir unos 10 minutos hasta que se consuma el alcohol.
Añadir el chocolate negro, y tan pronto se disuelva cubrir con agua caliente, para no cortar la cocción, tapar y dejar cocer a fuego lento durante 40 minutos, o hasta que esté tierno.
Servir con un poco de arroz blanco y con unas judías verdes y unas zanahorias hervidas.
¡¡¡¡Que aproveche!!!!
Bea, es que te ha quedado de fabula ese plato, y lo que cuentas me da tanta gracia y risa, porque me parece que soy yo, tratando de que Jose no mire lo que hago en la cocina, porque sino sin probarlo no lo come. Es agobiante,pero son supre caprichosillos, y ademas para que luego no se den cuenta…joeeer… pero son asi, y son adorables.
Un beso muy grande, este guiso esta estupendo.
Soraya
Jijijiji, yo una vez hice lo mismo con una cazuela de conejo ¡¡¡¡y en mi casa se chuparon los dedos!!! Eso sí, cuando dije que llevaba chocolate no me creyeron…
Ay Bea, qué risa, te imagino por la cocina con el chocolate en la mano haciendo de las tuyas, eres el demonio!!!. Le tenías que haber puesto de título: Guisado de cordero al chocolate, que vende mucho más mujer!!!, estás hecha una investigadora de sabores. Habrá que probarlo. Besitos
Bea:
Bravo Bravisimo me alegro muchisimo este arte tan maravilloso que te ha quedado este guiso.
Mi marido tambien es manoso pero el con las verduras por eso tengo que disfrazarlas muy bonitas y coloridas jaja.
Gracias por tu comentario y si quedo deli el lomito saltado y hoy no he cocinado nada pues salimos a comer pues yo amaneci con dolor de garganta ahora me toco a mi el rollo este del virus de la gripe.
Mis 2 amores estan mejor aunque no totalmente.
Gracias por preocuparte.
Que tengas una buena semana.
Saludos
olga.
Mira que no he probado yo nada de salado con el chocolate…me ha encantado como lo cuentas, y me voy a animar. Besotes guapa
Bueeenas,
Soraya,la palabra que los define es “raritos”. Bueno, por lo menos al mío. Besos
Mar, como habrás leído a mí sí que me costo probarlo, pero estaba delicioso!!!
Ana, siguiendo tus instrucciones le he cambiado el título…. te contrato de asesora!!!
Olga, mejórate chica, mi mami y mi tía llevan un mes arrastrando la gripe y el virus intestinal que hay por aquí, las pobres no se recuperan.
Su, anímate, recomendable al 100%.
Besos a todas. Bea
hola guapa me gusta mucho tu blog
y te he dejado una cosilla en el mio
espero que te guste
un beso
Qué buena eres!!!. Pero yo venía a buscar alguna novedad sobre ese paquete que llegó de Amazon y que tienes tan escondidito, a ver qué nos cuentas, so gastanta!!!. Hasta el 16/02 no llegarán mis libros, estoy ansiosa. Un beso
Ana
Hola Micarla, ya mismo me paso. Gracias.
Ana…. a ver si lo preparo esta tarde, es que estoy haciendo de ama de casa aprovechando que estoy de puente.
Besos. Bea
Hola Bea que bueno que te quedo super… no le temas al chocolate!!!! mira que aca muchos tambien le sacan la vuelta a guisar con el, pero ha sido un ingrediente importante en la cocina mexicana… tu inventa y no le tengas miedo!
saludos!!!
Hola Bea!!! Me has tenido intrigada hasta el último momento, con la historia del chocolate.
Por cierto, al final se lo confesaste o no.
Un besito!!!
Paola, lo reconozco, me dió un poco de miedo y un poco de “asquito” , malditos prejuicios, pero me ha encantado.
Blueberry,,,, sí se lo confesé, yo no puedo guardar ningún secreto….ese es uno de mis defectos. jiji.
Besitos. Bea
Me ha seducido la idea, gracias.